Al elegir un suplemento es clave saber leer las etiquetas. Aquí te dejamos una guía para que comprendas cada detalle de los productos que compras y saques el máximo beneficio.
1. Ingredientes Activos
Primero lo primero: asegúrate de que la etiqueta mencione claramente los ingredientes activos y su cantidad por porción. Por ejemplo, si compras un suplemento de Omega 3, fíjate en los gramos de EPA y DHA, los ácidos grasos que respaldan la salud cardiovascular y cerebral. Si compras multivitaminas, revisa qué vitaminas y minerales están incluidos y si cumplen con tus necesidades diarias.
2. Porcentaje de Valor Diario
Esto es clave, checa la dosis por porción o cantidad diaria recomendada (CDR) que te ofrece el suplemento. Esto lo verás en la columna de "% de Valor Diario" en la etiqueta. ¿Por qué importa? Porque necesitas saber si una sola pastilla o gomita te da suficiente, o si necesitarías varias dosis para alcanzar el beneficio. Pero es importante no pasarse tampoco; en algunos nutrientes, menos es más, sobre todo en el caso del hierro o la vitamina A.
3. Otros Ingredientes
Además de los ingredientes activos, los suplementos a veces traen otros ingredientes como saborizantes, colorantes, o rellenos; estos pueden estar presentes para darle estabilidad al producto, pero si prefieres evitarlos, busca etiquetas que especifiquen “sin colorantes artificiales” o “sin gluten” y lee la lista completa para conocer todo lo que estás consumiendo.
4. Origen y Certificaciones
Verifica si el suplemento es producido en México o importado. También es útil identificar certificaciones como GMP (Good Manufacturing Practices) o FDA verification (Food and Drug Administration), que garantizan ciertos estándares de calidad y pureza. Estas certificaciones te aseguran que el producto ha sido elaborado bajo estrictos controles de calidad.
5. Fecha de Caducidad
Los suplementos también tienen una vida útil, y después de esa fecha, su efectividad puede bajar o perderse por completo. No compres de más si sabes que no los vas a usar pronto.
6. Advertencias o Precauciones
Cada suplemento es diferente, y algunos pueden traer advertencias, como evitarse durante el embarazo o no combinarse con ciertos medicamentos. Dale una leída rápida a esta sección, especialmente si tienes alguna condición de salud. ¡Es mejor prevenir que lamentar!
7. Información Nutricional
Esto lo verás como una tablita que te dice cuántas calorías, carbohidratos, grasas y proteínas tiene tu suplemento. Aunque no es lo principal en todos los casos, es buena idea saber qué más estás consumiendo.
8. Dosis y Frecuencia
Finalmente, la etiqueta siempre debe decirte cómo tomar el suplemento. A veces la dosis se sugiere en "porciones" en lugar de tabletas o gomitas, y es fácil confundirse. Así que, cuando leas “dos porciones al día”, asegúrate de que te tomas la cantidad correcta de gomitas o cápsulas.
Así de sencillo, con estos pasos ya sabes cómo leer la etiqueta de tus suplementos. Recuerda que cuando se trata de suplementos, es muy importante conocer lo que estás consumiendo; cuida tu salud con productos de calidad y siendo consciente de lo que le das a tu cuerpo.